FIN DE CICLO


Catorce años y 1122 partidos después, se cierra un ciclo espectacular del Real Madrid Baloncesto. Gestionar estos 14 años desde la llegada de Pablo Laso hasta la salida de Chus Mateo, dos personas distintas pero cortadas por el mismo patrón, no puede quedar nunca en el olvido como dicen sus triunfos. Os hablarán del “sí, pero”, pero los resultados están ya escritos con letras de oro en la historia del baloncesto. Os hablarán de jugadores, de rivales, incluso – algo que considero muy ofensivo – de las manías y las formaciones físicas de ambos técnicos. Creeros a quien queráis, ser de uno o de otro, pero lo que está claro es que el dominio del Real Madrid en el baloncesto europeo en los últimos quince años ha sido constante, algo que no pueden decir muchos rivales. Esto no va de filias ni fobias, va exclusivamente de resultados y de estilo de juego. Porque en 1122 partidos, el Real Madrid ha logrado un balance de 858 victorias y 264 derrotas. En 56 torneos oficiales, el Real Madrid ha ganado 28 de ellos y ha jugado 43 partidos finales.

La grandeza, la historia, el escudo… todo lo que queráis. Pero en los últimos 50 años de baloncesto, nadie recuerda un espacio igual en el baloncesto. Solo se puede comparar a la generación de oro de la selección española que ha conseguido nada menos que 2 Mundiales, 4 europeos y 3 medallas olímpicas en casi 20 años. Decía el bueno de José Manuel Calderón “No os acostumbréis a estos éxitos, solo se han conseguido por tener una buena base de jugadores y mucha suerte, no es nada habitual”. Puedes vivir en una mansión y tener el mejor coche del mercado, pero si no lo mantienes como es debido, solo tendrás una casa y un coche. Pablo Laso y Chus Mateo han conseguido mantener al Real Madrid en la élite con diferentes jugadores que como todos, han tenido sus buenos y sus malos momentos. Y con diferentes rivales que han ido pasando por delante en sus diferentes épocas, como el ejemplo de Jasikevicius que ha pasado de ser campeón de Euroliga como jugador a serlo como entrenador, mientras que el Real Madrid seguía apareciendo en las fases finales de los torneos. Con suerte, teniendo al MVP en cuestión, con estrellas NBA, con jugadores con fichas altas, con la mejor horma de jugadores nacionales de la década y los extranjeros más comprometidos. No lo sé, pero lo que sí sé, es que en los 14 años de los que estamos hablando, el Real Madrid siempre ha ganado al menos un título cada temporada. Catorce años, catorce temporadas clasificado para la Supercopa y nueve presencias en la Final Four de 13 posibles (La temporada 2019/2020 no se terminó) y siempre clasificado en la Copa del Rey y en las finales de la Liga Endesa salvo en la fase final que se disputó en Valencia en el 2020.

Sólo Sergio Llull ha acompañado a Pablo Laso y a Chus Mateo en este quindenio. Imaginaros las de cosas que nos han pasado a cada uno de nosotros durante ese tiempo, lo que habrá cambiado nuestras vidas desde aquel verano de 2011. Pero siempre que poníamos la televisión veíamos al Real Madrid clasificado para las fases finales de los torneos. Cada año de una manera distinta, por la vía rápida o aludiendo a la épica, pero siempre llegaba. No me vale aquello de que “en la Liga Endesa, no tiene rival” por sus 14 presencias en Copa y Supercopa y las 13 veces que los blancos llegaron a las finales de la Liga, si después terminan llegan a nueve presencias en Final Four de la Euroliga llegando a disputar 8 veces el partido por el título y consiguiendo la presea hasta en tres ocasiones. Algo debe tener este equipo que llega a 12 finales de Copa del Rey para lograr 7 títulos, llegar 10 veces a la final de la Supercopa y llevarse el título 9 veces e incluso ir al otro lado del mundo para conquistar una nueva copa Intercontinental en aquél maravilloso 2015 donde se lograron todos los títulos que hubo en juego. Son números, no solo legado. Pablo Laso consiguió 22 títulos en 33 finales de 44 torneos posibles entre 2011 y 2022, mientras que Chus Mateo conquistó 6 títulos en 9 finales de los 12 torneos que disputó entre 2023 y 2025. Se tarda menos en enumerar los torneos donde el Real Madrid quedó lejos de los títulos en juego. No se trata de suerte, de poca competencia de los rivales, ni siquiera de proyectos millonarios. Porque por el Real Madrid han pasado cientos de jugadores que por sus cualidades han terminado yéndose a la NBA o conjuntos europeos que han decidido básicamente mejorarle sus emolumentos pero que nunca han dejado de permanecer a “la familia”.

Catorce años de baloncesto, catorce años de éxitos y catorce años de críticas. De informaciones que buscan desestabilizar, ningunear un proyecto y a sus protagonistas, buscar culpables dentro de la plantilla. En los últimos años las redes sociales se han llenado de comentarios descalificativos y demasiada opinión de lo que en la actualidad se llama “insiders” o “influencers”. Me reservo mi opinión al respecto, ya habrá tiempo de inmiscuirse en ese nuevo tema de reflexión y crear debate. Pero de lo que no hay ningún género de dudas son las hojas y hojas que ha estado escribiendo el Real Madrid Baloncesto en los últimos 14 años de la mano de Pablo Laso y Chus Mateo como personajes principales. 1122 partidos, 858 victorias y 264 derrotas (76,47% victorias) en total, 592 partidos de Liga Endesa con 485 victorias y 107 derrotas (82% victorias) y 465 partidos en Euroliga con 321 victorias y 144 derrotas (69% victorias). Para la Copa del Rey se han jugado 39 partidos con 32 victorias y 7 derrotas (82% victorias) y 24 partidos de Supercopa con 19 victorias y 5 derrotas (79% victorias) sumando el 1-1 de la Intercontinental de 2015. No me hagáis caso a mí, tampoco a los que nos llenan de información y opinión en twitter. Hacer caso a los números. Aquí solo expreso mi opinión y agradecimiento a una etapa inolvidable con dos entrenadores cortados por el mismo patrón. Pero el Real Madrid sigue y funcionará a las mil maravillas con otro entrenador y otro director deportivo. Ojalá siga generando éxitos pero ya será en un nuevo ciclo y en otros tomos diferentes.

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